Alimento muy rico en vitamina C, que ayuda a reforzar la salud del sistema inmunitario, y en enzimas, que favorecen la digestión. Además, es una fuente de fibra que contribuye al normal funcionamiento del tránsito intestinal.

En la producción no se emplean sustancias químicas de síntesis (pesticidas ni fertilizantes) ni organismos modificados genéticamente. Además, por ser ecológica, se lleva a cabo la rotación de cultivos, que permite el mantenimiento de la biodiversidad y aporta mayor contenido de vitaminas, minerales y fibra de forma natural.

Se recomienda consumir la pieza entera para aprovechar la fibra presente en la fruta. Ideal para tomar como postre después de las comidas por su sabor dulce y sus beneficios en las digestiones. Se puede consumir sola o incluida en los platos. También se pueden añadir en repostería, ensaladas, salsas y mermeladas.